Ante los tiempos de dificultad económica se interpreta como un símbolo de intelectualidad, austeridad e incluso de inconformismo.
El pasado 18 de mayo se estrenó en Estados Unidos la película Mansome, del director Morgan Spurlock, nominado a un Oscar por el documental Super Size Me, que demostró los efectos en la salud de los alimentos de McDonald’s. Vinculado siempre, de algún modo, al mundo de la estética, Spurlock indaga ahora en la problemática de ser hombre hoy, en una era en la que ellos parecen mucho más preocupados por su físico. Lo que la mujer ha experimentado durante décadas (“estás fea”, “estás gorda”) ahora también afecta al os hombres.
En la película, aparece Jack Passion, el tipo con la barba más larga de Estados Unidos, que ha sido nombrado en varias ocasiones campeón del mundo en curiosos concursos de longitud de barbas. En su grabación, manifiesta que el estado natural del hombre es ser barbudo. Y por lo tanto, según su opinión, todos deberían conservar el pelo en la cara. "Los que se afeitan están atrapados en la adolescencia perpetua", sentencia.
El director también habla sobre su bigote, un mostacho semicircular que él asegura que es la fuente de su creatividad (quizás inspirado en la doctrina judía que dice que el pelo en la cara es el puente que une la mente y el corazón; los pensamientos y las acciones).
El director también habla sobre su bigote, un mostacho semicircular que él asegura que es la fuente de su creatividad (quizás inspirado en la doctrina judía que dice que el pelo en la cara es el puente que une la mente y el corazón; los pensamientos y las acciones).
El pelo siempre ha sido una de las grandes preocupaciones de la estética masculina (sobre todo su ausencia). Y la barba, concretamente, un significante de edad y sabiduría en la mayoría de las culturas y religiones tradicionales. Pero en la actualidad, un grupo de jóvenes, mayoritariamente profesionales creativos, las lucen y las cuidan defendiéndolas como parte de su identidad y como símbolo de modernidad.
En las capitales de la moda hace ya tiempo que triunfan las barberías de toda la vida. Acabarán por expandirse aquí también y, por fin, acudir a ellas dejará de ser “cosa de señores mayores”. De hecho, cada vez hay más estilistas jóvenes que trabajan en estos establecimientos. Continúa leyendo aquí….